Guatemala (NBG).- Dos hombres vapuleados, dos vehículos quemados y un agente de la Policía Nacional Civil (PNC) herido es el saldo de disturbios que ocurrieron la madrugada de este viernes en la cabecera departamental de Sololá, luego que una turba intentó linchar a un presunto delincuente y a su hermano, informaron los Bomberos Voluntarios.
Los vapuleados fueron identificados como los hermanos Fredy Vinicio y Erasmo, de apellidos Cáceres Ara, mientras que del agente herido no se habían proporcionado datos.
El incidente comenzó a eso de las 20 horas del pasado jueves cuando agentes de la División Especializada en Investigaciones Criminales de la PNC iniciaron a perseguir el vehículo en el que se desplazaba Fredy Vinicio, sobre quien pesa una orden de captura por los delitos de asesinato, robo agravado y atentado, la cual fue girada por el Juzgado de Primera Instancia Penal de Quiché.
En la entrada a Sololá, el supuesto delincuente disparó contra a los agentes, lo que alarmó a la población. En el centro de la cabecera departamental, el presunto delincuente detuvo su vehículo y se subió al techo de una casa, aparentemente de familiares, por lo que la PNC y los vecinos rodearon toda el área.
A eso de las 23.30 horas los agentes ubicaron a Fredy Vinicio en una vivienda, pero este se había cortado los brazos en un intento de suicidarse. Las autoridades no pudieron evacuarlo a un hospital porque gran cantidad de vecinos tenía rodeada la vivienda y los refuerzos policiales no llegaban.
Pasada la medianoche, la turba intentó quemar el vehículo de Cáceres y en ese momento llegó Erasmo, hermano de Fredy Vinicio, a ver qué ocurría, pero los vecinos intentaron detenerlo y este logró poner en marcha su vehículo y se refugió en la casa de un pastor evangélico.
Los enardecidos vecinos sacaron a Erasmo de la vivienda y lo vapulearon, pero la PNC lo rescató, por lo que la turba hirió a un agente policial.
La turba regresó al área donde estaba escondido Fredy Vinicio y le quemó el vehículo y posteriormente ingresó a la vivienda y se lo arrebató a la Policía. Los vecinos le amarraron una cuerda al presunto delincuente y lo llevaron arrastrado hasta el cementerio de la localidad, donde lo vapulearon y le rociaron gasolina con la intención de quemarlo vivo.
A eso de las 5 horas de este viernes, llegaron al lugar autoridades indígenas, el gobernador Luis Florencio García Chutá y el alcalde Andrés Iboy, quienes lograron que la población entregara a Fredy Cáceres, quien fue llevado al Hospital Nacional de Sololá en una unidad de los Bomberos por su estado de salud es delicado.
Esta mañana la normalidad había vuelto a la cabecera departamental, aunque había una tensa calma entre la población.
Prensa Libre
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